4 de noviembre de 2010

Querido señor, tengo una queja

Le diré que necesito redireccionar mi vida, así de sencillo; porque he perdido la motivación y todo se me derrumbó en un sólo segundo, absolutamente todo y por estupideces que no valen mencionar.

Me he dado cuenta que las cosas no son hoy lo que parecen e inclusive nunca lo fueron y ya me canse de esperar que sean lo que yo quiero, es por ello que he tomado una decisión: esta es mi vida, y todo lo pasado lo he guardado en una caja de zapatos, comienzo a escribir mi presente y hacer realidad mi futuro; he dejado recuerdos y personas atrás, personas que no valen seguir siendo recordadas como lo eran ayer, cosas que ya no merecen seguir teniendo la importancia que tenían hasta ayer. 

Necesitaba redireccionar mi vida y creo que lo estoy haciendo. He dejado que mi imaginación vuele y sea libre al fin.

Por esto, querido señor, tengo una queja, pero no recuerdo cual es…

No hay comentarios: