7 de noviembre de 2013

Apariencias aparentemente reales.

Últimamente todas las palabras han sido cosa de parafrasear ¿dónde diantres te has metido inspiración? es que a caso se trata de la inspiración propiamente tal? Yo jamás he constado de una musa, y espero no tenerla jamás, no soy partidaria de la dependencia pues suficiente tengo con el cigarrillo. otros tienen la bebida y a veces pienso que en realidad si soy un alcohólico, me embriago a cada instante, me embriago de ilusiones, de deseos paupérrimos que no soy capaz de materializar, ni visualizar concretamente porque hace algún tiempo todo me resulta abstracto. Que analogía sentirme así. Sobre todo tratándose de mi.

¿Es que a caso ya no quedan sentimientos o emociones que plasmar con letras metálicas, con aplastamientos de teclas que engrasan cada vez más mis dedos rígidos? debería dejar de excusarme con la depresión, porque es parte de mi esencia, de hecho es absurdo que aun no haya conseguido convivir plenamente con ella. Lo odio, al igual que casi todas las cosas que me rodean, y es que siempre he sido una intolerante y amargada encubierta. Mi madre lo dice, no lo de encubierta sino lo de amargada y yo preciso en convencerme de que no es cierto, por que no lo es, ¿cómo podría serlo? no es cierto.

Y como no es cierto, así siento que me estoy secando.

Debería llorar, pero no puedo. No debo.

Un dolor de cabeza me invade y siento que es por mi culpa.  todo siempre lo ha sido. Al igual como siempre termino escribiendo de la pesadumbre que invade mi alma, y de mis dolores de cabeza. Tengo más de 50 años sobre mi espalda y corazón, tantas vivencias que no recuerdo, tantas cosas por las cuales quejarme. es la naturaleza.  Es que siempre he creído ser un anciano en cuerpo de joven, pues de niño e infante ya nada queda, me lo arrebató la vida o tal vez yo misma.

No hay comentarios: